La guerra preventiva en Colombia

Es la doctrina que el militarismo colombiano perfeccionó en la “Escuela de las Américas del Panamá-Canal-Zone” y que ha desarrollado durante los últimos 50 años como una Estrategia político-militar de la Oligarquía Financiera y Latifundista transnacional izada, destinada a impedir por todos los medios lícitos o no, que la llamada subversión del enemigo interno, se tome el Poder que detentan desde hace 174 años.

Este se constituyó en el objetivo máximo de su accionar y a él ha sometido gradualmente todos las demás instituciones (impuestos, economía, leyes, justicia, educación, iglesia, etc.) tratando de igualar según lo aprendido, a su corrupto Estado con TODA la Nación, unas veces de manera tímida y otras mas desembozadamente, como lo estamos viendo hoy día bajo el gobierno del mini-führer Uribe Vélez, con una “ decidida participación en la Guerra de toda la Nación”, según lo constata eufórico desde sus columnas del diario del gobierno El Tiempo, uno de sus gestores el ex-general Valencia Tovar.

Con este presupuesto se envió a entrenar en Israel en técnicas irregulares para defender al Estado, al jefe Paramilitar Carlos Castaño tal y como él mismo lo confiesa en su libro, y con este mismo argumento hoy después de que el comandante general de las Fuerzas Armadas de Colombia ha dado su parte de victoria asegurando que la subversión ya no se tomará el poder.

Castaño puede afirmar (12. 04. 04) por todos los medios de comunicación del gobierno, que por este servicio prestado que le ha costado al pueblo trabajador colombiano mas de 70 mil muertos en sus 25 largos años, no pagará “ni un día de cárcel y mucho menos irá a ser extraditado”.

Lo que nos recuerda la sentencia de Pablo Escobar de que prefería una tumba en Medellín a una cárcel en USA, y que agota irreversiblemente el monólogo bufo de la cuadratura del círculo, con que Uribe Vélez está empeñado en lavarles (económica y jurídicamente) sus DOS DISTINTOS delitos cometidos contra la humanidad en defensa del llamado Estado Social de derecho de Colombia : Genocidio y Narcotráfico.

La acción preventiva “ legitima” del Ejercito de Colombia para evitar que unas guerrillas salieran a relazar un retén en la carretera central, calificada como “equivocación de buena fe” tal y como lo justificó en su discurso mediático del 11, 04, 04 al país el mini-führer Uribe Vélez; ocasionó en una vereda olvidada de Cajamarca, la masacre de 5 civiles llamados por la oficina de la ONU en Bogotá “campesinos”, 4 de ellos menores de edad , uno de ellos, un bebé enfermo de 6 meses de nacido.

Uribe Vélez quien debió salir apresuradamente de su Finquita llamada “el Ubérrimo” que tiene en Montería en limites con la de Carlos Castaño, para pedir perdón de dientes para afuera, ha dicho públicamente que ha entregado las investigaciones “bajo la reserva del sumario a los organismos competentes para que rindan lo mas pronto posible un exhaustivo informe, aunque no hay razones administrativas para sancionar soldados y oficiales”.

Lo cual equivale a decir que el manto de Impunidad caerá sobre ellas y que pasarán a la historia como otros tantos hechos mas, de “daños colaterales” de esa inútil Guerra Preventiva aupada desde el Pentágono y que se libra en nuestro país bajo el nombre de Plan Colombia.

Las Naciones Unidas (ONU) que acaban también de pedir un conmovedor “perdón”, como si con eso bastara, por no haber actuado enérgicamente con todo su poder para evitar la masacre de un millón de africanos hace un año en Ruanda, habiéndolo podido evitar.

Ahora para que se cumpla la ley Transnacional, y no se siga matando campesinos desarmados, instan a los eficientes y profesionales “servidores públicos” (¿) de un Estado que como el colombiano según lo tienen comprobado y consta en múltiples de sus propias oficinas de New York, se ha caracterizado por sus continuas y múltiples violaciones, burlas e ilegitimidades no solo a las leyes nacionales sino a las Internacionales. ! Como si bastara hacer referencia a un legalismo abstracto.

Mientras tanto, los colombianos seguiremos sufriendo la escalada guerrerista intoxicados por el veneno de la falsimedia gubernamental de que la derrota de la Insurgencia está a la vuelta de la esquina, y oyendo las explicaciones circunstanciales de sus “spin doctors” o intoxicadores inmediatos de opinión.

De que fue...la neblina y el clima, que no se pudo simular un combate con un bebé, que los cuerpos aparecieron, que la presión por los resultados, que el síndrome de los despidos de Neiva, que el cabecilla de los bandidos iba herido, que fue mucha la seguridad que se brindó esta semana en las carreteras y muchos los atentados que se evitaron, que es para brindarle seguridad a la población, etc., etc.

Lo cual como la bruma de las fumigaciones, impedirá para poder continuar con ella, visualizar todo el gran contexto de la Ajena Guerra Preventiva de medio siglo que venimos padeciendo y resolver políticamente sus reales y verdaderas causas histórico-sociales.

* El Dr. Alberto Pinzón Sánchez, médico y antropólogo, participó en la Comisión de los Notables en el pasado proceso de paz en Colombia.