Un país donde a las Palabras se contesta con Balas
Llenos de indignación, tristeza y preocupación por los actos violentos que vienen ocurriendo durante los últimos ías en el departamento del Cauca, desde la Escuela de Justicia Comunitaria de la Cordillera, hacemos un llamado urgente a las personas, organizaciones y movimientos sociales de Colombia y los demás países de America Latina. En este momento están lastimando, hiriendo y masacrando a nuestros indígenas, son familias enteras, madres, padres, hijos, abuelas y abuelos, son líderes comunitarios, soñadores y soñadoras, mas de siete mil personas, que se dieron cita desde hace dos días en lo que ellos han llamado La Gran Minga Cultural y de Resistencia Social, para exigir justicia y dignidad, para exigir que se les cumpla lo que se les ha prometido.
A estas personas, que para exigir sus derechos deciden manifestarse pacíficamente, el gobierno colombiano les responde con un ejercito. En la María Piendamo, donde se viene realizando la Gran Minga, se ha desplegado todo un operativo militar en contra de estas personas. Hay hombres armados, helicópteros y tanques de guerra para responder a estas personas que para expresarse, movilizarse y hacerse escuchar, recurren a las palabras y el caminar. Como resultado de esto, hay ya más de treinta indígenas heridos, dos asesinados, y la amenaza permanente de más represión con la excusa de que el movimiento ha sido infiltrado por las FARC.
Por todo esto, convocamos a las organizaciones, movimientos, hombres y mujeres que compartimos el respeto por la vida, la dignidad y la Paz, a que nos unamos en torno a un grito urgente y permanente para exigir en Colombia:
* La detención inmediata de los actos violentos que se vienen realizando en contra de la Gran Minga Cultural y de Resistencia Social en el departamento del Cauca, y la apertura de los procesos de investigación pertinentes que permitan hacer justicia en torno a los asesinatos y demás violaciones de los DDHH que vienen realizando las Fuerzas Armadas y el gobierno de Colombia en contra de estas personas.
* No se estigmaticen las diferentes formas de movilización y exigencia pacifica y legitimita de nuestros derechos, pues con la falsa excusa de que todo el que no este de acuerdo con el gobierno es terrorista, a todo se le da tratamiento de guerra en este país, ante cualquier inconformidad se encuentro uno con un fusil.
* Que a las palabras se conteste con palabras, no con balas. Que se de un tratamiento pacifico a nuestros conflictos, propuestas y reivindicaciones.
* Que el gobierno nacional respete y cumpla los acuerdos realizados en las mesas y procesos de negociacion con nuestras organizaciones y movimientos sociales.
Equipo Coordinador
Escuela de Justicia Comunitaria de la Cordillera
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