Ruiz Pereyra Faget
NUEVA ESTRATEGIA MILITAR GLOBAL DE ESTADOS UNIDOS
Previamente expuso un cambio en la estructura de las Fuerzas Armadas_ una reducción de los efectivos de tierra y el mantenimiento y ampliación de las fuerzas aéreas y navales, asi como las actividades de inteligencia.
Obama declaró a los periodistas allí presentes que la nueva estrategia se orientará a la zona Asia-Pacífico, a la que considera "crítica", sin descuidar el Medio Oriente por la amenaza de Irán. "Nuestro Ejército será más reducido, pero el mundo debe saber que Estados Unidos va a mantener su superioridad militar con unas Fuerzas Armadas ágiles, flexibles y listas para un amplio abanico de contingencias y amenazas", dijo el Presidente.
Al día siguiente el editorial principal de "New York Times" se refirió al tema, señalando que el Presidente adoptó la nueva estrategia, apoyado en tres realidades: las guerras prolongadas y altamente costosas de Afganistán e Irak, sin resultados categóricos, la crisis económica y el elevado déficit fiscal y las "amenazas" de China e Irán. Pero había una cuarta razón, escribe el editorialista, a la que no se refirió, que son las críticas de los candidatos republicanos a su política militar, en un año electoral en el que Obana se juega su reelección. Por ello subrayó que Estados Unidos seguirá siendo la principal potencia militar del mundo y conservará su liderazgo en los asuntos mundiales.
La reacción de China fue rápida. El Ministro de Defensa, Geng Yansheng, - reclamó a Estados Unidos que sea prudenrte en sus palabras y en sus acciones. "Esperamos que Estados Unidos actúe de acuerdo con los tiempos y trate con China y su Ejército de una forma objetiva y racional, sea cuidadoso con sus palabras y acciones y haga más por el desarrollo de las relaciones entre los dos países y sus ejércitos", expresó Geng en un comunicado.
Unos días antes -el 27 de diciembre de 2011-, un experto chino, Lin Zhiyuan-, integrante de la Academia de Investigaciones Militares de China, en declaraciones al periódico del Ejército de Liberación, denunció las intenciones del gobierno yanqui: "Desde el fin de la guerra fía, estados Unidos estableció como prioridades de su estrategia el combate al terrorismo desplegando tropas en Afganistán e Irak, haciendo pocos progresos en Asia. Hoy está revirtiendo esta estrategia cuyo objetivo es conservar su liderazgo en el mundo. Está retirando tropas del campo de batalla y centralizando el foco en Asia, donde está tomando medidas sustanciales".
A una pregunta del periodista, sobre las expresiones de amistad en la 12ª Ronda de Conversaciones sino-estadounidenses- sobre cuestiones de defensa el experto en asuntos militares, contestó: "La actitud de Estados Unidos hacia China, es ambigua: al tiempo que participa en tareas de cooperación y prevención, sigue en la región una política de "seguridad balanceada", prestando las llamadas "ayudas humanitarias" y vendiendo armas e instando a sus aliados a que se sumen a esa línea". Lin se refería, sin duda, a las permanentes ventas de armas de Estados Unidos a Taiwán, a pesar que, desde la visita de Nixon a China, en 1972, reconoció que la Isla forma parte del Estado Chino, así como el permanente apoyo a las reclamaciones del Dalai Lama de independencia para el Tibet.
Por su parte, Rusia, tiene una visión más amplia de la estrategia actual de Estados Unidos. El objetivo de esa estrategia militar, es presionar la alianza euro-asiática de Rusia y China eje mayor del BRIC-, por tres frentes: al oeste, la OTAN; al suroeste y sur, el Medio Oriente y Afganistán, y por el Sureste, el fortalecimiento de las bases militares en Japón, Corea del Sur y Diego García, así como la Flota del Pacífico, dotándola de más portaviones y submarinos nucleares. Como ejemplo, señalan el fracaso de las negociaciones con la OTAN sobre la instalación de misiles en Polonia y Rumania y la decisión del Kremlin, de responder instalando los suyos en Kaliningrado, Prusia Oriental (Discurso del Presidente Medvédev el 23 de noviembre de 2011).
Otro ejemplo, es la política guerrerista que sigue Estados Unidos en el Medio Oriente, utilizando como pretexto, la ausencia de derechos políticos y la represión de la oposición en Siria y el programa nuclear iraní. En realidad, está dirigida a tres objetivos: la defensa de Israel, la protección de sus empresas petroleras así como a las monarquías títeres que le sirven y la desestabilización de la Federación Rusa en la región del Cáucaso, utilizando para ello como punta de lanza a Georgia.
Analistas independientes van aun más lejos. Dicen que la estrategia global es anglo-estadounidense. Para los británicos existen dos zonas prioritarias: el Medio Oriente y el Atlántico sur. Esta región también interesa a Estados Unidos por el proceso de integración sudamericana que tiene dos puntales_ en el norte, Venezuela, y en el sur, Argentina. Mientras el Comando Sur norteamericano, se encarga de la primera, es necesaria una gran Base Militar en las Islas Malvinas, para presionar por el sur, tarea que estaría a cargo del Reino Unido que ocupa ilegalmente dichas islas..
La nueva estrategia global imperialista, sería, en una época más compleja, donde los centros económicos y financieros occidentales perderían la hegemonía, la continuidad de la "doctrina Churchill, " de marzo de 1946, expuesta en Fulton (Estados Unidos), donde llamó a una "alianza de los pueblos de habla inglesa", para salvar la civilización occidental, amenazada por el "peligro rojo".
No obstante, como hemos visto, ni China ni Rusia se han sorprendido por las declaraciones de Obama en el Pentágono, rodeado de charreteras. Tampoco la UNASUR ya que en la Conferencia de Ministros de Defensa, realizada en Lima, el 13 de mayo del año pasado, dio los primeros pasos para crear una estructura militar que sirva de sostén al proceso integracionista que los imperialismos, hasta hace poco dominantes en nuestra región, tratan de frenar por distintas vías.